Buenos Aires – En el microcine del edificio Libertad se llevó a cabo una exposición, organizada por la Dirección General de Material Naval de la Armada, acerca del reflotamiento del ex destructor ARA “Santísima Trinidad”.
La disertación estuvo a cargo del Director de Casco, Electricidad y Máquinas Navales de la Armada, Capitán de Navío Ingeniero Gerardo Jorge Bellino. y el Capitán de Navío Luis Antonio Paredes, encargado de coordinar las ramas técnica y operativa de aquel proceso.
“La charla tuvo como fin ahondar en el proceso de reflotamiento tomado desde las etapas previas de investigación e ingeniería hasta el método adoptado y sus particularidades en conjunto”, expresó el Capitán de Navío Bellino.
El desarrollo de la exposición comenzó con la mención del “principio de Arquímedes”, fundamento físico que se erige esencial dentro del sistema escogido. Seguidamente, se enumeraron las etapas recorridas y, hacia el final, hicieron referencia a las distintas particularidades surgidas de dicho recorrido.
De esta forma, los Capitanes de Navío brindaron detalles acerca de las intensas tareas llevadas a cabo, principalmente, por el Servicio de Salvamento y Buceo de la Armada y de los operarios del Arsenal Naval Puerto Belgrano, a mediados de diciembre de 2015, para lograr el reflotamiento del casco e ingresar al destructor ARA “Santísima Trinidad” en el dique de carena N° 1 del Arsenal Naval Puerto Belgrano, luego de estar semisumergido durante casi tres años.
Este fue el corolario del trabajo conjunto entre personal y medios de varios destinos de la Base Naval Puerto Belgrano. La maniobra en sí, duró más de dos horas e implicó la participación de personal de Control Puerto, mientras que el ARA “Tehuelche” fue el remolcador destacado para tal fin.
Para la concreción de este objetivo se realizó un estudio previo, aprobado por peritos en la materia. En base a ese estudio se elaboró un plan de trabajo que comprendió, en primera instancia, el alistamiento del material existente y la adquisición de equipos de salvamento nuevos, ampliando además las capacidades del Servicio de Salvamento de la Armada (SISA) para misiones futuras.
Durante dos años consecutivos trabajó el personal del SISA para cumplir con las tareas que involucraban un gran profesionalismo y esfuerzo de su parte.
Asimismo el Comando de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada (COAA) contó para esta tarea con una organización de asesoramiento integrada por especialistas en operaciones de salvamento e ingenieros navales y civiles de la Dirección de Cascos, Máquinas y Electricidad y de la Dirección de Infraestructura. Además, las distintas dependencias de la Base Naval Puerto Belgrano y de su Arsenal Naval colaboraron en diversas tareas.
Las tareas en el casco fueron realizadas por hombres y mujeres, la mayoría buzos de salvamento profesionales pertenecientes al Servicio de Salvamento de la Armada, al Área Naval Atlántica, al Área Naval Austral, al Área Naval Fluvial y al Comando de la Flota de Mar.
El reflotamiento
El equipo de trabajo realizó una ardua labor para determinar las vías de acceso de agua y realizar su estancamiento, efectuar operaciones de lastrado (carga de pesos bajos), achique (despeje de agua) y dragado en proximidades del buque.
El reflotamiento se realizó por la acción simultánea de estas acciones, sumadas a la fuerza con aparejos de playa preparados especialmente para la maniobra. El buque fue fijado y se generaron las fuerzas necesarias para rotarlo sobre su eje longitudinal, recuperando finalmente su condición de estabilidad. La operación fue de gran complejidad y riesgo, lo que requirió supervisión y pruebas permanentes.